Una lujosa vela para el masaje de rostro y cuerpo, recomendada para los rituales de belleza.
Su fórmula está basada en valiosos ingredientes vegetales, incluyendo aceites nutritivos de semillas de jojoba, almendras y cacao, que son fuente de vitaminas y ácidos grasos insaturados del grupo omega. Conforme se va fundiendo, la vela se convierte gradualmente en un aceite de masaje caliente y aromático que nutre intensamente la piel y los sentidos, proporcionando relajación y alivio para el estrés. La fórmula de la vela contiene una mezcla específicamente compuesta de aceites esenciales puros con un amplio espectro de propiedades: limitan la formación de radicales libres y ejercen efectos antinflamatorios y antienvejecimiento.
Una fragancia especiada de aceite de clavo, originario de Mauricio, se combina armoniosamente con canela dulce y notas de jengibre, que brindan calidez. El masaje con el aceite reduce la tensión, creando sensaciones cálidas y placenteras.
El ritual deja la piel hidratada de forma óptima, suave y aterciopelada, y envuelta en un aroma sensual.
RECOMENDADO PARA: cualquier tipo de piel, especialmente la madura, seca y deshidratada.
RESULTADOS: piel perfectamente hidratada, nutrida y regenerada, suave como el terciopelo y hermosamente perfumada. Relajación y calma profundas para el cuerpo y los sentidos.
MODO DE USO:
- Enciende una vela y espera unos minutos hasta que se derrita una pequeña cantidad del producto. A continuación, apagar la llama y toca la mecha con los dedos mojados para que deje de arder. Vierte el aceite caliente sobre la mano o directamente sobre la piel, evitando los contornos de los ojos. Gracias a su bajo punto de fusión, el aceite nunca estará demasiado caliente.
- Extiende el producto sobre la piel y masajea suavemente las partes de la cara o del cuerpo que quieras, repitiendo cada movimiento varias veces.
- Después del masaje, espera hasta que la vela se vuelva a solidificar. Guárdala en su embalaje o bajo una campana especial, lejos de fuentes de calor y la luz del sol, para conservar sus valiosas propiedades durante más tiempo. Antes de volver a utilizar la vela, acorta suave -mente la mecha con una recortadora especial.